por jdanes 
Invertir en ladrillo, como popularmente se conoce a la inversión inmobiliaria, siempre será una opción apetitosa para millones de inversores a lo largo del mundo. Una de las posibilidades que el mercado día a día abre a nuevos inversores se concentra en las viviendas de obra nueva, consistente en la adquisición de terrenos de diversas áreas para la construcción o edificación de nuevas propiedades inmobiliarias.
Desde el 2013, la bolsa española ha recibido a cerca de 40 empresas relacionadas con el mercado inmobiliario español, algo nuevo para este tipo de industria. Y es que la posibilidad de rescatar inmobiliarias con problemas financieras y un bajo precio de los activos de bien raíz crean el entorno perfecto para la inversión de firmas nacionales y extranjeras.
La llegada de capital nuevo a España promovido por grandes fondos internacionales ha dado un revés a la situación del precio de la vivienda nueva en España. La intención de las inversiones se enfoca principalmente en la construcción de miles de viviendas de obra nueva al año, y aunque son 8 las grandes firmas inmobiliarias en suelo español, lo cierto es que solo ocupan el 18% de todos los movimientos bursátiles relacionados con el bien raíz, lo cual da cuenta de la variedad de capitales entrantes y salientes en el mercado.
Las grandes promotoras cotizantes en bolsa
A continuación, las 8 principales promotoras de vivienda nueva, con mayor volumen de construcciones registradas anualmente en territorio español son:
- Vía Celebre
- AEDAS Homes
- Neinor Homes
- Amenabar
- Quabit
- Pryconsa
- Metrovacesa
- Habitat
Y es que la venta promedio de vivienda nueva en España durante los último cuatro años ha sido de 54.315 títulos mobiliarios, aumentando gradualmente desde el 2016 (37.512 viviendas vendidas) a 2019 (71.562 propiedades).
En naciones como Francia o Inglaterra, el 50% del mercado es acaparado por 3 o 4 compañías promotoras, lo que demuestra la diversidad y las bajas barreras de entrada que supone para compañías extranjeras y nacionales invertir en el mercado inmobiliario, aquí en España.
Construir para rentar
Aunque las grandes promotoras de obra nueva tienen sus objetivos planteados en la compra y construcción de vivienda nueva para la venta, el mercado de construir para rentar está empezando a despegar entre los grandes capitales, dando cabida aún a pequeñas y medianas empresas que pelean la adquisición de suelo en terreno español.
Esto se debe a un boom del mercado inmobiliario de miles de familias queriendo rentar en lugar de acceder a un crédito bancario para la adquisición de vivienda nueva, en parte debido a la falta de historial crediticio positivo o la posibilidad de cambio de residencia permanente en el mediano plazo.
Y aunque existe un alto volumen de capital esperando para invertir en la construcción de propiedades destinadas al alquiler, ciertos factores han imposibilitado que comience el boom en este sector, tropiezos como el alto precio del suelo y la llegada del Covid han sido circunstancias adversas que imposibilitan que este mecanismo de negocio libere todo el potencial que encierra.
Sin embargo, en 2020, el mercado inmobiliario capto un aproximado de 2.600 millones de euros destinados a la construcción de obra nueva para alquiler, una cifra record, gracias en parte a la capacidad que inversores y dueños de terreno han tenido para poner de acuerdo los términos de este tipo de operaciones sobre la mesa.
El apetito inmobiliario en la bolsa española
España fue durantemente golpeada por la crisis Subprime de 2008 de Estados Unidos, tanto a nivel laboral como en el precio de la vivienda, pero lo que para unos se convirtió en la destrucción o el deterioro progresivo de su capital año a año, para otros se convirtió en la maravillosa posibilidad de atraer nuevos capitales para la reforma y la construcción de obra nueva.
Es por ello que el crecimiento de participación de las promotoras en bolsa supera con creces los registros de los últimos 10 años, un comportamiento que se espera continúe en accenso en 2021 y marque la posibilidad del ingreso de más capital extranjero en el mercado nacional.
Y es que las pequeñas, medianas y grandes corporaciones esperan poder tomar parte en el negocio inmobiliario, el cual es muy apetecido por todo tipo de inversionistas, especialmente porque que es uno de los mecanismos de inversión en capital más seguro y estable del mundo, aunque no siempre el más rentable.
Y aunque el rendimiento financiero de los bienes raíces no es necesariamente superior al de otros mecanismos financieros, el hecho de invertir en bienes fijos, con proyección de alza o recuperación de valor a lo largo del tiempo, supone la posibilidad de asegurar los fondos, esquivando la volatilidad de otro tipo de inversiones como la inversión en acciones, en materias primas o en Forex, que requiere de un estudio más preciso y una asesoría profesional especializada.
Si a esto sumamos el afán corporativo por participar en el mercado inmobiliario en España, las mejores previsiones apuntan a un aumento de hasta el 25% en la inversión de capital en obra nueva para 2021, el cual registró en 2020 un valor de 9.477 millones de euros.
